Por docentes del PFG Comunicación Social de la
Universidad Bolivariana de Venezuela, sede Zulia
Antonio
Fernández. Coordinador del Programa de
Formación de Grado Comunicación Social, Sede Zulia
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Cuando hablamos del
término comunicación alternativa ya tenemos un problema semántico, porque
primero tenemos que preguntarnos qué es comunicación, y por qué le vas a
agregar el adjetivo alternativa, entonces tendríamos que ir a una investigación
sobre el sentido, el significado de la palabra comunicación.
Sabemos que hay un
debate de vieja data sobre el concepto de comunicación pero si nos
aproximamos a lo que es el verdadero quehacer comunicativo entonces
tendríamos que decir, como lo plantean algunos autores, que la comunicación
es un proceso de interacción que requiere participación a partir de una
matriz de opinión, o a partir de una opinión personal, que cada quien tiene.
Y cuando se habla de comunicación alternativa ya desde el punto de vista
semántico estás aceptando que hay un modelo de comunicación que es el que se
impone a nivel mundial bajo unos criterios de explotación mercantilista, bajo
unos criterios de funcionalismo capitalista, que va en contra de la verdadera
naturaleza de lo que es el sentido de la comunicación pura, cuando hablamos
de interacción y de participación.
Entonces, ya allí
empezamos a tener una pequeña crisis de criterio con respecto a la
comunicación alternativa. Hay otros autores que dicen que ya no se denomina comunicación
alternativa, hay otros que lo quieren bautizar con el término otra
comunicación para tratar de definir esos criterios, ahora si nosotros vamos a
vincular o a tratar de vincular el término de comunicación alternativa con el
quehacer comunicacional o comunicativo de las comunidades, de los sectores
populares, del barrio, de los sectores campesinos, de los pueblos pequeños,
que es completamente distinta a la realidad que se vive en las ciudades.
Pudiéramos hablar
entonces que, más allá de estudiar una comunicación alternativa pudiéramos
entonces estudiar lo que es la función de una gestión para la comunicación desde el punto de vista comunitario,
y pudiéramos hablar incluso de proponer sistemas
de comunicación comunal desde el punto de vista mediático para enfrentar
esa hegemonía mediática que tenemos de los grandes centros de poder que dicen
llamarse medios de comunicación social.
Entonces, es un
trabajo que primero debe comenzar por conocer cómo es esa dinámica, cuáles
son las características de esa comunicación que se mueve, que se vive, que
todos los días se aviva también, y que lamentablemente recibe la influencia
de los grandes medios que tergiversan o distorsionan precisamente, esa
naturaleza comunicacional pura, que hay en las comunidades, en la gente común
y corriente, que va más allá de lo que dicen los medios de comunicación.
Tendríamos que estudiarla posibilidad de cómo se
construye esa comunicación o sencillamente cómo describirla, porque de pronto
ya está construida y lo que ha sido es ignorada o se ha tratado de ignorar
porque en verdad ese tipo de comunicación no mediática es realmente una
amenaza para los grandes ejes hegemónicos de los grandes medios de
comunicación.
Y aparte de eso
desde el punto de vista político comunicacional, ya estamos hablando por
ejemplo de las funciones de un Estado o hablando por ejemplo de las funciones
de una sociedad que requiere de alguna manera poner reglas claras para que
todo el mundo tenga una verdadera participación; y la libertad de poder opinar
y de expresarse tiene que ser en todas partes de manera libre, entonces
pudiéramos hablar de una gestión, de un modelo, de una manera de gestionar la
comunicación desde el punto de vista comunal.
Sería incluso
factible preparar las bases para crear si es posible una rama dentro de la
comunicación social que se dedique a estudiar este tipo de gestión de la
comunicación comunal tal cual como se estudia la comunicación organizacional,
tal cual como se estudia por ejemplo la comunicación mediática, en este caso
está partiendo de una realidad nuestra, que es la creación del estado comunal
a partir de un ejercicio que se da en las pequeñas localidades, que se va
expandiendo en la medida en que hablamos por ejemplo de comunas.
Estamos hablando
prácticamente de que vamos rumbo a un estado comunal que requiere otro tipo
de modelo comunicacional porque el actual es totalmente incompatible con lo
que se quiere construir. Hablamos entonces de una gestión, de una gestión de
la comunicación comunal.
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Miguel Fuenmayor. Docente del PFG, especializado en producción radiofónica
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Yo comenzaría por
decir lo que no es. Para mí lo que no es, es la comunicación que hasta este
momento ha imperado en el mundo, la comunicación que se plegó, en el caso de
la radio, a partir de su nacimiento casi, a ser un medio comercial. Y también
la prensa; la prensa también cuando se hizo una industria se hizo una empresa
comercial, matando y dejando de lado todas aquellas iniciativas de prensa
obrera, de prensa de los mineros, de los sindicatos, de los pueblos
indígenas.
En el caso de la
prensa y nosotros vemos la historia de la prensa de acá del Zulia, en el
siglo XIX había más periódicos que los que existen hoy. Aquí en Maracaibo
podríamos decir que existen dos periódicos, para una ciudad que tiene más de
2 millones de habitantes, y que tiene una diversidad cultural muy amplia.
Entonces partimos de esa premisa, de que la comunicación alternativa, el
concepto y las prácticas de la comunicación alternativa es el resultado de lo
que está incipientemente dándose ahora. Donde la comunicación se rescate de
ese aspecto comercial, y segundo para construir un concepto de comunicación
alternativa, e incluso de comunicación, tenemos que desplazarnos de la teoría
que nos colonizó a nosotros, de las teorías que validaban los
norteamericanos, los franceses y todos esos teóricos que nos dijeron a
nosotros ésta es la teoría de la comunicación vigente dejando de lado por
supuesto nuestro propio pensamiento, nuestras propias formas de hacer, de ver
la realidad, y yo creo que nosotros estamos como que en una encrucijada,
donde necesitamos construir casi todo, entre eso el concepto de comunicación.
Yo también ando en la búsqueda de un concepto de comunicación, de la
comunicación intercultural, que también alimenta la comunicación alternativa.
En Latinoamérica se han dado experiencias de comunicación alternativa, porque
si nos vamos a las definiciones, se han tratado de definir la radio popular,
la radio comercial, la radio alternativa, la radio comunitaria, pero tenemos
esa angustia de que esa no es la definición que nosotros pensamos que puede
arropar estas nuevas prácticas, tenemos entonces que construir ese concepto
de comunicación alternativa, porque lo obvio sería lo que se ha dicho hasta
ahora, que la comunicación alternativa es la diferente a la comercial, pero
esa comunicación alternativa es diversa, es plural, es multiétnica, es
pluricultural, yo creo que esa es la esencia de la comunicación que nosotros
debemos manejar en el caso de nosotros, del microcosmos que es el Zulia. El
Zulia se alimenta de miles de culturas que debemos también investigar,
debemos identificar para construir un concepto que sea capaz de abarcar
ámbitos que hemos mencionado.
La comunicación
alternativa genuina debe nacer de la mano de otro modelo de producción
social, porque en el modelo capitalista neoliberal la comunicación
alternativa quedaría reducida a unos pequeños micro focos donde la gente
pueda hacer algunas cosas, pero, la hegemonía de lo simbólico se deja a lo
comercial.
Si nosotros
revisamos la legislación el Estado venezolano se ha reservado el espectro
radioeléctrico en todas sus vertientes, pero ha dejado la producción de
contenidos al sector privado, y esa es la simbología que ha construido al
pueblo venezolano, y que ha deformado las identidades nuestras.
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Víctor Durán. Docente del PFG facilitador de las unidades de periodismo de
investigación, de frontera y conflicto
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Sobre comunicación
alternativa hay muchos autores que han teorizado, sobre lo que se supone es
el concepto de comunicación alternativa. Hay quienes se centran en el
mensaje, quienes se centran en cómo el mensaje puede ser alternativo, hay
quienes se centran en el medio, de cómo el medio puede ser alternativo, y ahí
tenemos lo que son las emisoras comunitarias, las emisoras que se supone
deben ser alternativas a la hegemonía masiva que ejercen los grandes medios
de difusión, más que de comunicación.
Considero
particularmente que al entender o al suponer el concepto de comunicación
alternativa hay que tomar en cuenta uno de los elementos que a veces es poco
considerado, en el sentido de que se toma en cuenta el mensaje, se toman en
cuenta los medios, pero, yo creo que es importantísimo al momento de entender
la comunicación alternativa que hay que estudiar quién hace la comunicación.
Si partimos de la
idea de que son los grandes monopolios, los grandes capitales quienes hacen
comunicación, quienes tienen el dominio y la hegemonía comunicacional, en mi
humilde opinión un modelo de comunicación alternativa, o un concepto de
comunicación alternativa debe fundamentalmente entender quela gente es el
sujeto de comunicación.
La comunicación
alternativa necesariamente tiene que surgir de la base, de los empobrecidos,
de los explotados de siempre, es una parte del proceso que no tiene que ver
con el mensaje, que no tiene que ver con el medio sino que tiene que ver con
el ser humano que es el que se empodera de una herramienta comunicacional y
presenta una alternativa al dominio capitalista, a la hegemonía.
No se debe centrar
necesariamente en el mensaje, no se debe centrar necesariamente en el medio
sino en el ser humano, en la gente que hace comunicación y que tiene otra
realidad, muy distinta a la de las corporaciones, muy distinta a la del dueño
capitalista con grandes inversiones que puede hacer comunicación. Al entender
que necesariamente la comunicación alternativa debe surgir de la base de la
comunidad organizada, de los empobrecidos, de los excluidos, en ese momento
en mi humilde opinión estamos en presencia de una comunicación verdaderamente
alternativa, que surge en otro sentido de lo que es la vida, la realidad, la
comunicación.
Primero hay que
partir del supuesto, no del supuesto, ¡de la gran realidad!, pero también de
la lamentable realidad de que la comunicación al servicio de las
corporaciones, al servicio de los grandes capitales se ha constituido en un
trampolín para grandes negocios, y para un ejemplo regional de ello, vemos
como los Pineda aprovechando el gran medio que tienen de difusión éste se ha
constituido en un trampolín para tener la cementera, para tener acciones en
la farmacéutica, para tener la empresa constructora que domina ese ámbito en
el estado Zulia con concesiones inclusive para hacer carreteras como la
tuvieron con el Estado venezolano, pero fue el medio el que se constituyó en
ese trampolín en el sentido de las alianzas que se establecen.
Es la comunicación
ligada al poder económico, ligada a cómo invertir en comunicación y que eso
se traduzca en mayor regalía o mayor capital.
En el sentido de la
comunicación humana alternativa no necesariamente el ámbito económico es el
que debe dominar la relación comunicacional. No necesariamente debe ser vista
la comunicación en el caso de que sea un modelo alternativo como un trampolín
para hacer negocios, porque sencillamente eso es lo que ha desvirtuado la
gran idea, o el gran sueño de emisora comunitaria que hemos tenido, por
ejemplo en la ciudad de Maracaibo, emisoras que salen habilitadas por un
modelo comunitario, que se supone deben ser una alternativa al modelo
hegemónico masivo radial y sencillamente están haciendo negocios,
sencillamente están viendo la posibilidad de utilizar el medio para rendir o
para hacer dinero, es lo que está matando el sentido comunicativo,
alternativo con el cual debieron haber nacido las emisoras.
Yo creo que es una
suerte como de disfunción cuando se asocia la productividad económica al
medio comunitario, al medio alternativo, yo creo que es una especie de
harakiri comunicacional que se realizan quienes están al frente de esos
procesos, se desvirtúa todo el sentido filosófico, todo el sentido social,
todo el sentido político, inclusive todo el sentido humano de lo que es el
concepto de comunicación y lo que es el hacer comunicación.
Considero que
fundamentalmente eso tendría que partir de lo que muchas personas denominan
la superestructura, en el sentido de necesariamente, así como todas las
instituciones o muchas de las instituciones que en el ámbito más general de
nuestro Estado deben modificarse, por aquello de todo el daño que nos ha
hecho la implantación del Estado liberal burgués, de las taras liberales que
aún convergen en nuestro estado, que aún con una voluntad política hacia un
tránsito al socialismo siguen vigentes, todavía permea y eso tiene que ver con
modificar las relaciones de producción, con modificar la propiedad de los
medios de producción.
Porque
sencillamente siempre vamos a estar entrampados en ese círculo vicioso del
dinero, en el círculo vicioso de la necesidad de producirlo constantemente
aunque sea ese poquito que produzco regalando mi fuerza de trabajo, lo que me
da para medio alimentarme, para medio vestirme, para medio vivir, ni siquiera
para entretenerme o educarme. Cuando esa relación perversa sea sustituida yo
creo que desde ese ámbito general se puede modificar ese escenario.
Grabación y transcripción José Javier León |
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